Con el estallido del maíz en las bolsas se incorporan sustancias químicas que comportan un riesgo para la salud de las palomitas de microondas. Entre los compuestos químicos detectados en las palomitas están el perfluoroalquilo y el polifluoroalquilo. Habitualmente en la literatura se les nombra a estos compuestos como PFAS. Las altas concentraciones de estas sustancias en las palomitas terminan detectándose en la sangre. Esto ocurre en las personas que tienen consumo frecuente de las palomitas de maíz de microondas.
¿Qué otras fuentes de PFAS se han descrito?
En una publicación previa se comentó el riesgo de exposición aumentada a los compuestos PFAS entre los trabajadores que utilizan los extintores de espuma para los fuegos. Entre las fuentes de los compuestos PFAS se citan al agua potable, como contaminante de los suelos, en las sartenes por su propiedad antiadherente, algunos alimentos, productos de limpieza y en cosméticos a prueba de agua. También se les encuentra en determinadas alfombras y otros tejidos de tapicería en los que se busca un revestimiento resistente. Así mismo, están presentes en envases utilizados en la comida rápida.
Entre los riesgos para la salud por la exposición a estas sustancias químicas están los cánceres de próstata, testículo y riñón. También se asocia con un mayor riesgo de asma bronquial, daño hepático,hipertensión arterial, infertilidad, retraso en el crecimiento de los niños y enfermedad del tiroides. Así mismo, debilita las respuestas inmunitarias, particularmente de las vacunas, aumentando la susceptibilidad a las infecciones.
Datos del Estudio NHANES
Utilizando los datos de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición (NHANES) se determinaron los valores séricos de PFAS de más de 10.500 personas. Se precisaron los niveles en sangre de PFAS y su relación con el consumo de palomitas de maíz para microondas, comida rápida, comida en casa y comida en el restaurante. Las muestras fueron tomadas entre 2003 y 2014. Estos compuestos PFAS fueron detectados en el 70 % de las muestras examinadas. Las comidas en el hogar se asociaron con niveles bajos de PFAS. Los niveles altos de PFAS se detectaron en las comidas rápidas, pizzerías y otros restaurantes. Y los niveles más elevados se encontraron en los consumidores diarios de palomitas de maíz para microondas. Este incremento de los niveles de PFAS puede ser de hasta un 63 % entre los que habían tenido un consumo diario en los últimos 12 meses.
Una investigación publicada recientemente en Science ha conseguido la degradación de los PFAS por medio de una técnica de mineralización a baja temperatura. De esta manera los convierte en compuestos inofensivos. Esta nueva técnica podría ser la forma de destruir estos compuestos en los suelos y el agua contaminada.
Comentario:
El consumo frecuente de palomitas de maíz para microondas incrementa los niveles de PFAS en la sangre. Estas sustancias químicas son perjudiciales para la salud y se pueden encontrar en el agua potable, los alimentos, productos de limpieza, cosméticos y tejidos de tapicería. En algunos países se ha restringido la utilización de estas sustancias químicas y se buscan alternativas menos tóxicas. La FDA informó recientemente que en Estados Unidos ya no se usan estas sustancias en las bolsas de maíz ni en las cajas de pizzas. Lamentablemente, otros países la siguen utilizando. Hasta que la exposición deje de ser un riesgo, hay que evitar aquellas fuentes que generan mayor exposición.